Tus luces de la navidad iluminan la buena nueva de esperanza, amor, fe, alegría y paz
« Honraré la Navidad en mi corazón y procuraré conservarla durante todo el año ». – Charles Dickens . La Navidad es la Buena Nueva que trajo el Mesías. El santo día lo antecede una Nochebuena , augurio del cumplimiento de la profecía de que nacerá el Salvador y redimidor de los pecados, constructor del sacro camino hacia la salvación eterna. La Navidad no es un espacio en el calendario, tampoco una fecha para celebraciones y alegrías pasajeras. La Navidad no es un ambiente para los cuerpos, sino para los espíritus; ella enciende la llama interna que, con los mejores sentimientos humanos, todos portamos como don divino. Ella exhorta y persuade, con suave ternura, al amor perenne y a sentir y compartir, con todos, la alegría de ser y de vivir. La Navidad es siempre la creación de los instantes que convocan a que los corazones se unan en torno a cálidos sentimientos de alegría, de esperanza, de fe, y en especial de amor filial, de storge (como amor familiar...